Cuando Eduardo Garzón sale en antena mi optimismo se desborda. Pienso que si un personaje como este es capaz de salir en prime-time dando lecciones (?) de Economía, sería de esperar que el día de mañana me acepten en Harvard.
Pero lo cierto es que ni Eduardo nos enseña nada de esta preciosa ciencia, ni a mí me cogerán el teléfono los de Massachusetts.